top of page

Running is a gift

Correr es un regalo

Todos tenemos épocas, ¿verdad? Tenemos épocas en las que te parece que todo te va bien, épocas en las que te parece que todo te va mal, la época de estudiante, la época que protestas por todo. Yo estoy en esa época en la que la vida no deja de sorprenderme.


Tengo 39 años y un buen día descubres que te ha llegado la madurez, como la publicidad de Antena3 cuando estás viendo el peliculón, sin avisar, pero aprovechando la pausa que haces en ese momento. Así es la madurez. Sabiendo que ya no pedirás un licor Cuarenta y Tres con cola porque hay que beber gin-tonic y, aunque un poco amargo, acaba gustándote.


Y es que chicas, os diré una cosa, la vida es un regalo, muchas veces vamos tan deprisa que ni siquiera nos paramos a ser conscientes de ello, del gran regalo que tenemos y aunque no voy a descubriros nada nuevo, hoy siento ganas de compartirlo con vosotras: correr es un regalo.


Correr es un regalo. Calzarte unas zapatillas y salir a hacer unos kilómetros, sin ningunas ganas, aunque no lo creáis, es un regalo.

Al principio la cabeza no quiere y las piernas menos, los primeros dos kilómetros estarás pensando quién te habrá dicho que esto de correr engancha, pero cuando te dejas llevar, cuando sacas el tiempo de donde sea para hacer tu entrenamiento, cuando sabes que tienes un día flojo y has quedado para correr con las #locasquecorren, sabes que no hay nada que te detenga, que los limites los pones tú, porque corriendo te conoces a ti misma, te das cuenta de lo que puedes llegar a hacer y como dice mi amigo Alex: “correr te hace más fuerte”


Lau








¡GRACIAS POR LEERNOS!


bottom of page