Hola
Todo en la vida tiene un origen. En nuestros post de presentación os contamos cada una los motivos o razones por las que empezamos a correr. Os hablamos un poco de nosotras, poco a poco, os ponemos fotos de carreras y de actividades que realizamos, la verdad que somos un torbellino de energía; Energía positiva y en movimiento, somos ”Locas que Corren” y el nombre nos va como anillo al dedo.
Pero no siempre nos va todo como nos gustaría, este 2016 está siendo especialmente durillo. Os voy a contar el día que la vida me cambio los planes.
Me considero una persona con suerte, afortunada en todos los aspectos. Creía que incluso era dueña de mi vida. Yo tomaba y tomo mis propias decisiones porque si os paráis un poco, tomamos decisiones a todas horas. Desde las cosas más simples, como qué me pongo, qué desayuno, hasta las más complejas, pero hay decisiones que te toman a ti.
El día 31 de enero de 2016 corrimos la carrera del Parque de la Ribera 10 Km, donde hice mi mejor tiempo. Pero el día 1 de febrero me diagnosticaron un Cáncer de mama. Se que podéis imaginaros qué susto, pero sólo aquellas personas que han pasado por esto se imaginan lo que es. De repente los médicos me decían el diagnóstico y el protocolo que hay que seguir para esta fea enfermedad. Seis meses de quimioterapia primero, operar, radio... Además, se te va a caer el pelo, cómprate una peluca, uff, uff. No se hace uno a la idea de las decisiones que tiene que tomar y que no te gustaría estar tomando. Yo en toda esa vorágine de información y de estado de shock sólo podía preguntar: " ¿Qué pasa con mis carreras?".
Los médicos alucinaban y su respuesta era: "Se quedan aparcadas por un año". ¿Cómoooo? ¿un año sin correr? ¿sin poder hacer deporte?.
Os diré que gracias a esto de ser runner he sabido llevar la situación mejor. Lo he comparado con la Maratón y en muchos momentos he parado a por avituallamiento y me he sabido reservar. Siempre que una prueba me ha dado miedo he pensado en los deportista, en el deporte, para llegar a la meta hay que tener espíritu de superación, capacidad de sufrimiento. En la medida que mi cuerpo me lo ha permitido he seguido saliendo a correr y hoy tengo mi primera carrera después de meses sin poder ponerme las zapatillas. Estoy nerviosa y emocionada como si fuera la primera vez. Tengo la gran suerte que no lo haré sola, estaré rodeada de gente que me anima y me apoya a seguir adelante y estoy segura de que disfrutaré.
Porque estoy peleando por una medalla, la medalla de lo maravillosa que es la vida.
Laura.
¡GRACIAS POR LEERNOS!