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DIARIO DE UNA CORREDORA EN APUROS

Marzo de 2019. La idea.

Creo que dejé de ir al gimnasio en el 2013. Mi fascitis plantar ya se ha curado…he cogido algunos kilos de más... me compro unas bonitas zapatillas de running… mi prima está en un grupo de chicas que corren y me anima a que vaya con ellas. Ella me presenta...hola locas que corren!!! Gracias por la acogida!!! Y empezamos a trotar… ufffff, no las sigo, me ahogo literalmente… ellas nooo, van hablando, incluso pretenden que hable yo, jajajaja. No tengo aire ni para decirles que tengo flato y que dejo el entrenamiento. Creo que al menos ya he corrido 10 minutos…En casa pienso que igual debo correr antes por mi cuenta. No entiendo como a la gente le gusta correr, pero voy a intentar amortizar mis superzapatillas, sí, eso haré!!!

Durante varios días, corro yo sola a intervalos de tiempos cortos (suena música de Rocky), me aburro miserablemente, pero sigo.

Abril de 2019. Locas rosas.

Varios domingos con ellas, son majas estas locas, muy majas. Me encanta encontrarme con las chicas y hacer deporte con ellas. Bueno, lo intento al menos porque sigo sin pillarlas, no puedo hablar mientras corro pero me divierto escuchando sus locas conversaciones.

Voy a asistir como loca oficial a la primera carrera, la de la mujer. Llega el día, marea rosa, la vida en rosa, mujeres de rosa al poder, buen ambiente, bonita causa, mis primeros 5 kms corriendo. Llego a meta y mis locas ya han llegado hace un rato, pero la caña cae con ellas.

Creo es aquí, de rosa, cuando siento por primera vez que me ha gustado correr.

Mayo de 2019. La pájara.

El primer domingo de Mayo las locas quieren ir al monte de La Pila y voy que me he venido arriba. Corre, corre, sube, sube… pero que mal me encuentro, me flojean las piernas, me siento mareada. Se llama pájara, supera al flato, supera a todo lo de antes. Las locas me cuidan… creo que este camino aún va a ser durillo, pero voy bien acompañada.

Junio de 2019. Los canes.

Hoy corremos por Sansa, las locas corremos por la protectora de animales. Mis primeros 10K, llego muerta, muerta matada. La causa también lo merece… estoy en modo satisfaction!!!

Septiembre de 2019. La mano.

Estamos en Viana, otros 10 k, varias locas presentes, me cuesta, me cuesta. A mi lado va Cristina: "prima no puedo", "prima si puedes", me espera, tira de mí, por eso no paro… por eso llego.

Octubre de 2019. La Ocurrencia y los Coach.

Con este diario, con este historial y me apunto a la Behobia!!! Me animan las locas, me animo yo, "nena, tú vales mucho". No es valentía, es inconsciencia…Vamos a entrenar duro eh??? Los domingos las locas ahí siguen, dándolo todo… pero para la Behobia necesitamos más, hay que darle, darle duro. Sola nunca hubiese podido pero Cristina, Estela y yo hacemos un superequipo. Nos cargamos de ilusión y quedamos, horas, tardes, noches, da igual, zapatillas y kms… No tenemos entrenador, no tenemos coach… pero ¿quien dijo que lo casero no puede ser apañado?

Superplan de entrenamientos: Estela tiene un amigo que sabe de veras del arte de correr y le orienta y le dice, o se lo manda por whatsaap y ella nos lo cuenta. Le hacemos caso, Juantxo, te hacemos caso. Cristina va a clases para corredores y comparte sus conocimientos, "así se suben las cuestas, al bajar mejor así…" Un día dice Estela que chispazos, nos lleva al Cortijo… Cristina dice que su monitor ha dicho esto, ha dicho lo otro…todo vale, todo nos suma.

Con Belén y Ángeles hacemos 13k , con Laura, Isabel y María subimos al toro de Osborne (jajaja, da suerte tocarle los…), vueltas a parque del Ebro con Rosa… Las murallas de Pamplona… todo vale, todo suma… un día menos para Behobia.

Noviembre de 2019. El brindis.

Hoy es el día de la Behobia… Nervios y mucha ilusión, estamos seguras de que vamos a darlo todo porque las 3 hemos entrenado para eso. Igual nos ha faltado técnica, pero nos ha sobrado corazón.

Y ahí estamos las neskas, en la línea de salida... bailando al son de la animada música, con nuestra capa para la lluvia de los chinos y nuestros pies mojados. Empezamos a correr, hay lluvia, hay viento, incluso nos cae granizo, pero el ambiente y la gente de esa preciosa tierra vasca nos llevan en volandas. Cada zancada, cada pisada, suma y suma por 3, porque estamos juntas en esto, porque vuestra fuerza es mi fuerza y la mía la vuestra.

Ahí está el pirata con su bandera y su música heavy a todo volumen. Nos hace levantar la mano apuntando con el índice y el meñique. Geles, plátanos, gominolas, ilusión, ilusión, ilusión, y vamos sumando y llegamos las tres. 2 horas y 1 minuto es un tiempo genial, es un tiempo hecho con el corazón….estoy en modo ‘Amo correr con mis compas’.

Nos espera la sidrería, 3 vasos escanciados, un brindis, por nuestro pequeño gran triunfo y un deseo: que el próximo año podamos volver juntas y sumemos más.

Porque… JUNTAS SE CORRE MEJOR.



Elena




¡GRACIAS POR LEERNOS!



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